El candidato a lehendakari por el PSE-EE, Nicolás Redondo, aseguró
en su último acto electoral que el Gobierno que aspira a presidir
«no pasará factura a nadie» porque defenderá «un futuro sin
revanchas». Advierte que apoyar a PNV-EA o IU-EB es depositar un
voto en favor de Arzalluz y dice que en estas elecciones «nos
jugamos todo».
«No olvidaré, pero no soy partidario de dar la vuelta a la
tortilla, sino de hacer un futuro para nacionalistas y no
nacionalistas en plano de igualdad», afirmó Redondo en Lasarte,
localidad guipuzcoana elegida por los socialistas para cerrar la
campaña por ser la del concejal Froilán Elespe, el último miembro
del PSE asesinado por ETA.
Las menciones a Elespe fueron constantes en este acto en el que,
ante la presencia de la viuda del concejal y de su hijo, Redondo
pidió el voto por la libertad y «suerte y acierto a la sociedad
vasca para no volver a vivir tragedias como las vividas aquí en
Lasarte». Redondo Terreros aprovechó para pedir a los ciudadanos
que sólo votan en las generales que acudan el domingo a las urnas,
porque en estos comicios «nos jugamos todo, sobre todo la
libertad».
Redondo hizo un «requerimiento a la conciencia de esos
ciudadanos que sólo acuden a votar en las generales porque
consideran que las autonómicas «no son las suyas, sino de los
nacionalistas». Advirtió que, a consecuencia de esa manera de
proceder, el PNV «ha gobernado desde hace 20 años».
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