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El PSOE quiere que la reunión de la Comisión de Seguimiento del 'Acuerdo por las libertades y contra el terrorismo', que se producirá mañana, se den los primeros pasos para que el pacto se abra a los partidos nacionalistas. En el encuentro se estudiará una propuesta de IU en defensa del diálogo, con fines similares a los de los socialistas. Sin embargo, el portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, aseguró que el pacto siempre ha estado abierto a todos aquellos que defiendan la Constitución, el Estatuto, las instituciones vascas y la libertad.

El portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Jesús Caldera, se refirió a la reunión de la Comisión de Seguimiento que tendrá lugar hoy, en la que, según explicó, PP y PSOE reafirmarán los principios del acuerdo. «Cuantos más seamos los que combatimos el terrorismo, antes acabará esta lacra», añadió. El encuentro también servirá para analizar la nueva situación del País Vasco después de las recientes elecciones autonómicas, en las que «la inmensa mayoría de los vascos decidió rechazar la violencia y el terrorismo». Caldera solicitó una mayor cooperación entre los gobiernos central y vasco, y al lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, le pidió que lidere la lucha contra el terrorismo.

Estas palabras vienen a confirmar que la reunión de mañana servirá para que los socialistas impulsen la apertura a medio plazo del acuerdo antiterrorista a todos los partidos, incluyendo a las fuerzas nacionalistas. Este acercamiento sería posible gracias a los pasos que ha dado el PNV tras las elecciones vascas. No obstante, el PSOE no pretende que se incorporen a esta acuerdo, sino que podría ser a otro documento con el mismo espíritu de aislamiento de los terroristas y todos los que les prestan apoyo. el portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, aseguró que el Pacto Antiterrorista «tiene pies de barro» y se vino abajo tras los resultados del 13-M. Además, criticó que en el citado pacto entre PP y PSOE se excluyó a las demás fuerzas democráticas «con el fin de desplazar a PNV-EA del Gobierno vasco». En este sentido, insistió en la necesidad de un nuevo planteamiento «más ajustado a la realidad» que esté formado por todos los que están en contra de la violencia de ETA.