El Congreso ratificó definitivamente ayer los respectivos proyectos
de Ley de Presupuestos Generales del Estado para el 2004 y de
Acompañamiento, que entrarán en vigor el 1 de enero.
Tras la intervención de los grupos y las pertinentes votaciones,
ambas normas salieron adelante con el apoyo del PP y CC, frente al
rechazo del resto de formaciones políticas, incluida CiU -que votó
en contra por primera vez desde 1996-, y con la aprobación de las
enmiendas introducidas en el Senado.
Los próximos presupuestos -que serán ejecutados por otro
Gobierno al concluir el año próximo la legislatura actual- se basan
en una previsión de crecimiento del 3%, sustentado en una demanda
interna muy dinámica y una clara recuperación del sector exterior,
que redundará en un aumento del empleo del 1,9%, traducido en
300.000 nuevos puestos de trabajo.
Según las cuentas para 2004, el esfuerzo público inversor
rondará los 28.000 millones de euros, el 10,5% más que en el 2003,
mientras que el gasto social crecerá en torno al 7% y especialmente
el destinado a pensiones, que aumentará el 7,1%, a la vez que se
elevarán un año más las partidas dedicadas a seguridad ciudadana y
Justicia.
Al llamado Fondo de Reserva de la Seguridad Social se prevé una
dotación presupuestaria en el 2004 de 3.000 millones de euros.
En el debate de ayer, el diputado del PP Jordi de Juan valoró
que los presupuestos ahonden un año más en el equilibrio
presupuestario, lo que permitirá aumentar el gasto en inversiones y
políticas sociales, dijo, tras recordar que éstas absorben más de
la mitad de los recursos de las cuentas del 2004.
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