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Casi 5.000 simpatizantes del Partido Popular, según cifras de la Policía Nacional, se concentraron ayer junto a la sede del partido en la madrileña calle Génova para mostrar su respaldo al presidente del Gobierno en funciones, José María Aznar, y al secretario general popular, Mariano Rajoy, tras su derrota en las elecciones del pasado domingo. Muchas de las consignas que corearon tenían como objetivo al próximo jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, al que tacharon de «presidente de Al Qaeda» y acusaron de estar «con el terrorismo».

El ambiente de tensión que se produjo lo vivieron en sus carnes reporteros de televisión de Tele 5 y también de Europa Press, que sufrieron un intento de agresión por llevar colgadas en sus cámaras fotografías de José Couso, asesinado en la guerra de Irak por un disparo de un tanque estadounidense.

Unos 5.000 populares respondieron al llamamiento, e incluso Rajoy, junto con el máximo responsable popular en Madrid, Pío García Escudero, se asomaron a los balcones de Génova para saludar a los manifestantes.