Los reyes Felipe VI y Letizia a su llegada a la recepción celebrada este miércoles en el Palacio Real con los miembros del cuerpo diplomático acreditado en España. | Efe - Chema Moya

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El rey ha defendido este miércoles un alto el fuego «duradero» en la Franja de Gaza y que se facilite «al máximo» la ayuda humanitaria para atender a la población del territorio palestino, al tiempo que ha reclamado la liberación inmediata de los rehenes israelíes capturados tras los ataques del pasado 7 de octubre. Felipe VI, junto con la reina Letizia, ha presidido en el Palacio Real de Madrid la recepción al cuerpo diplomático acreditado en España, en la que ha vuelto a reclamar la solución de los dos Estados, Israel y Palestina, con «garantías de seguridad mutuas, plena independencia y fronteras reconocidas».

En la ceremonia celebrada en el Salón del Trono, el rey ha comenzado su intervención refiriéndose a la situación en Oriente Próximo ante la tragedia en Gaza que, a su juicio, «está estremeciendo la conciencia de la humanidad», como también lo hizo el «execrable» atentado terrorista cometido por Hamás contra Israel, detonante del conflicto. Aquel ataque, que dio pie a la operación militar desplegada por el Ejército israelí, merece la «más enérgica condena», a lo que ha unido la exigencia a Hamás para que libere «inmediatamente» a los rehenes.

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A continuación, el jefe del Estado ha pedido que se facilite «al máximo el acceso humanitario para atender a la población palestina de Gaza y establecer un alto el fuego duradero», después de que hayan muerto más de 26.700 gazatíes desde el inicio del conflicto, además de miles de desplazados. A la recepción del cuerpo diplomático han asistido la embajadora de Israel, Rodica Radian-Gordon, y el de Palestina, Husni Abdelwahed, que ha lucido una 'kufiya', el típico pañuelo palestino.

Como ya hizo el pasado día 11, Felipe VI ha vuelto a defender el reconocimiento de Palestina como Estado, para que conviva con el de Israel con «garantías de seguridad mutuas, plena independencia y fronteras reconocidas». Una solución que, ha recordado el monarca, España defiende «invariablemente» desde la Conferencia de Paz de Madrid de 1991. Por ello, ha animado a la comunidad internacional a que explore las vías para que el reconocimiento de los dos Estados sea «asumida, defendida y realmente aplicada».