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MARIA E. NADAL La temporada de vendimia en el territorio de la denominación de origen Binissalem, en la comarca de es Raiguer, ha empezado con un adelanto de unos cinco días respecto al año pasado en la mayoría de los viñedos y con un aumento de calidad en los cinco municipios incluidos en la denominación de origen, que son Santa Maria del Camí, Consell, Binissalem, Sencelles y Santa Eugènia. La causa principal del adelanto de la vendimia ha sido el gran calor que ha padecido Mallorca este verado y que han sufrido muy especialmente las cepas durante los últimos meses, ya que en la etapa de maduración han resistido temperaturas demasiado altas.

Las viñas están muy castigadas, aunque los especialistas en el tema afirman que pese al descenso evidente en la cantidad, la calidad es muy buena. «Me atrevería a decir que es incluso mejor que el año pasado», asegura Josep Carretero, gerente de la denominación Binissalem. La variedad de uva que se cultiva en la mancomunitat d'Es Raiguer es, por excelencia, el Manto Negro, que constituye el 80 por ciento de la uva y que se usa para la elaboración de vino negro. Le siguen después las variedades de Premsal Blanc para el vino blanco, y las más minoritarias son el Tempranillo y Cabernet, que se usan principalmente con la finalidad de mejorar el color del vino.

Todavía es pronto para valorar los resultados finales de la cosecha, aunque todo parece indicar que los vinos tendrán todavía mejor calidad que en años anteriores. «Creemos que la producción se puede reducir un 30 por ciento respecto a 2000, aunque la calidad es mejor», aseguró Maria Antonia Oliver, dueña de las viñas Hereus de Ribas, de Consell. Los trabajos de la vendimia se desarrollarán de manera escalonada y progresiva hasta que concluya la temporada, a finales de septiembre.