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J.M.S. El «punt verd» de Porreres se ha convertido en un vertedero incontrolado de todo tipo de residuos. Electrodomésticos, motores de máquinas, colchones, hierros, maderas y todo tipo de restos y residuos se amontonan en el recinto ubicado justo detrás de los contenedores de papel, cartón y cristal. Esto ha motivado las quejas de algunos vecinos, quienes además del mal estado y la suciedad que rodea al punto de recogida, critican que en la mayoría de ocasiones que se acercan a reciclar cartón, los contenedores están llenos.

El delegado de Medio Ambiente del Ajuntament, Jaume Martorell, explicó al respecto que «se ha llegado a un acuerdo con las empresas que generan cartón para que tengan un contenedor de cartón». En referencia al mal estado del recinto, dijo que el problema es que está abierto y la gente aprovecha para dejar todo tipo de restos. «Teníamos que comenzar unas obras de reforma para limpiar el recinto e instalar unas barreras pero se han atrasado», explicó Martorell, quien añadió que habitualmente la gente del pueblo hace un buen uso del punto de recogida, «lo que pasa es que viene gente de otros pueblos o algunos que pasan el fin de semana y dejan los restos».