Los jóvenes intentaron hacer una parodia de lo ocurrido con el islote Perejil. Foto: J.PÉREZ.

Los jóvenes intentaron hacer una parodia de lo ocurrido con el islote Perejil. Foto: J.PÉREZ.

19/08/02 0:00
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A.B/PFO Un grupo de jóvenes autodenominados «Exèrcit Popular dels Països Catalans» 'liberó' de la soberanía española la recién bautizada Illa del Fonoll Marí, antes conocida como s'Illot, un islote del Llevant de Mallorca cerca de Porto Cristo. El acto tuvo lugar ayer por la tarde. Sobre las 17 horas, colocaban la bandera de las cuatro barras y estrella sobre la conquistada república del Fonoll Marí, a 15 metros de la costa. Para llegar al lugar, se sirvieron de una serie de velomares. Sobre la isla, leyeron un manifiesto a través del que tomaban posesión de ésta.

Así se resolvía ante la mirada de muchos de los curiosos este acto simbólico que una serie de jóvenes nacionalistas que pertenecían a Joves per la Llengua, a Esquerra Republicana o simplemente defensores de la tierra, decidieron poner en marcha, aprovechando que se celebran las fiestas patronales de este núcleo costero.

Joan Lladó, uno de los impulsores, explicaba que «queríamos hacer un acto festivo y, al mismo tiempo, reivindicativo. Hemos elegido s'Illot porque es el lugar de más fácil acceso y, además, ahora hay mucha gente porque son las fiestas. Hemos comenzado a liberar el país de esta manera», comentaba con ironía este joven, que añadió que su pretensión era pasar un momento divertido y hacer una parodia de lo ocurrido en la isla Perejil.

Durante el acto de conquista, Joan Lladó leyó el manifiesto escrito en catalán antiguo: «Nós, en nom de lo molt noble e honorable poble català, dels Contes de la Cerdenya... de lo Rosselló, de lo Principat, de lo Regne de València, de les Illes Balears e de les Pitiüses prenem possessió d'aquesta illa anomenada s'Illot per la república del Fonoll Marí...». La lectura terminó con un ¡Visca la terra lliure! La misión se cumplió en poco más de una hora y abandonaron sus posiciones muy deprisa, aunque dejaron su bandera como prueba de su conquista.

Joan Lladó valoraba así el acto: «No pretendíamos mucha cosa más que hacer esta pequeña reivindicación y hemos dejado nuestra bandera en la isla de Fonoll Marí, esperando que se respete la nueva república. Nos hubiesemos quedado más en la isla pero el suelo es muy abrupto».