Las calles Major y Burdils se encuentran colapsadas durante una gran parte de las horas del día. Foto: M. F./ A. B.

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El caos circulatorio que padece el núcleo costero de Porto Cristo está indignando a los residentes y veraneantes que cada año, por estas fechas, sufren retenciones en la entrada y salida de la carretera, pudiéndose observar colas de automóviles de hasta dos kilómetros de longitud. Las principales calles de la población "Burdils, Major y el enlace de la carretera de Cala Anguila, pasando por el Riuet" sufren retenciones diariamente que duran entre diez minutos y un cuarto de hora. Esta circunstancia se puede registrar a cualquier hora del día.

La única alternativa que existe para desbloquear esta situación es construir la vía de circunvalación que está incluida en el Plan Director de Carreteras que elaboró, en su día, el Govern balear. No obstante, al ser traspasadas las competencias al Consell de Mallorca, la institución se encuentra con el grave problema de la financiación.

El delegado de Porto Cristo, Jaume Brunet (AIPC), ha explicado a Ultima Hora que «nos hemos dirigido en varias ocasiones a las instituciones autonómicas para expresar nuestra preocupación sobre este problema. El Consell de Mallorca es consciente de ello y sabe que se debe dar una solución, pero el problema está en la financiación. Tengo conocimiento de que el Consell ha hecho gestiones para obtener ayudas económicas a través del Gobierno central para ejecutar el proyecto, pero hasta el momento ha sido imposible conseguir estas ayudas».

Brunet reconoce que «no existe ninguna medida provisional para solucionar este problema circulatorio. Desde el Ajuntament hemos estudiado varias alternativas y hemos comprobado que no tiene otra solución que construir la vía de circunvalación. Otra medida que podría desviar el tránsito rodado es el de acondicionar la carretera de Son Forteza que, por cierto, ya se está arreglando, puesto que descongestionará la carretera de Porto Cristo a Calas de Mallorca».

La situación de caos circulatorio es momentánea, indica Brunet. «Realmente es un problema de los meses de verano cuando se juntan los residentes de Manacor que veranean en Porto Cristo, los turistas y los autobuses de visitantes, además de tener una mayor actividad socioeconómica en estas fechas. Por lo demás, en invierno se puede decir que casi nunca surge este problema porque el tránsito está mucho más controlado».

De todas formas y aunque se trata de un conflicto veraniego, el delegado de esta zona costera de Manacor es de la opinión de que «es necesario que se lleve a cabo la vía de circunvalación porque solucionaría los problemas circulatorios que se registran en las calles principales de Porto Cristo». Esta congestión viaria, vista desde la opinión del turista, deja mucho que desear y da una mala imagen a los visitantes de países extranjeros.