El paso a nivel del tren en Inca será reemplazado por un túnel de 75 metros

El anteproyecto de soterramiento del paso a nivel del tren, que ya está en manos del Ajuntament d'Inca, prevé también un acceso directo desde el mismo tunel al futuro aparcamiento subterráneo del Campet des Tren, que construirá la Conselleria d'Obres Públiques y que tendrá capacidad para 197 vehículos aproximadamente.

Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) tiene previsto poner en marcha un sistema de descuento para los usuarios de dicho aparcamiento si también utilizan el tren y viceversa como medida para fomentar el uso del ferrocarril entre los vecinos de los pueblos de la comarca.

El coste previsto para estas dos actuaciones es de 4 millones doscientos mil euros aproximadamente (700 millones de las antiguas pesetas), que pagará íntegramente la Conselleria.

El Ajuntament d'Inca estudia ahora el contenido del anteproyecto para tratar de paliar el impacto visual de esta actuación, así como los efectos que tendrá en la circulación de tres de las principales arterias de la localidad, concretamente las calles Antoni Maura, Germanies y Francesc de Borja Moll y es que, a pesar de la longitud del subterráno, el túnel solo estará cubierto en su tramo central mientras que en los extremos, quedará una importante superficie descubierta que supondrá la eliminación de algunos de los cruces ahora existentes, condenando algunas vías.

Así, la Policía Local estudia ahora la posibilidad de prolongar la parte cubierta del proyecto hasta el cruce de la Avenida Germanies con la Avenida Antoni Maura para salvar así el tráfico que se dirija desde la estación del tren hacia la carretera de Lloseta y desde Antoni Maura en dirección a la estación.

El alcalde de Inca, Pere Rotger, es consciente de que «no será una obra fácil y evidentemente tendrá un impacto visual importante, aunque es una obra necesaria».

La Conselleria d'Obres Públiques tiene previsto convocar este mismo mes el concurso público para la licitación de las obras de supresión del paso a nivel que se adjudicarán previsiblemente en marzo, según han informado fuentes del Ajuntament d'Inca.

Una de las incorporaciones más destacadas al anteproyecto es la construcción de un paso subterráneo para peatones que discurrirá paralelo al paso para vehículos aunque a distinto nivel e independizado por mamparas de vidrio de seguridad para evitar los molestos ruidos del tráfico e impedir cualquier posible atropello. Se accederá a dicho paso peatonal a través de dos escaleras situadas a ambos lados de las vías del tren en las calles Germanies y Francesc de Borja Moll.