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El alcalde de Puigpunyent, el socialista Joan Ferrà, reclama más participación de los ayuntamientos en los tributos del Estado. El Ajuntament perfila en estos momentos el presupuesto para este año que ascenderá a 1,9 millones de euros y que aumenta un 18 por ciento con respecto a 2003. Esta cantidad, sin embargo, no permite realizar inversiones de envergadura en la localidad, según precisa ebatle. «El presupuesto está basado en los pocos ingresos por eso reclamamos una solución para el problema de la financiación de los municipios. La situación es cada vez peor. Se ha eliminado el IAE, lo que significa que los ingresos son cada vez más limitados y cerrados», indica Ferrà a este diario. A su juicio, existe una desproporción importante entre los ingresos por habitante del Estado que reciben los ayuntamientos grandes y los pequeños. «Nosotros somos habitantes de segunda o de tercera categoría», subraya.

La única posibilidad para realizar proyectos es buscar subvenciones y «vienen cuando vienen». De cualquier modo, el Ajuntament tiene que realizar alguna aportación y no le queda más remedio que endeudarse, señala Ferrà. «Siempre estamos en la cultura de las subvenciones. Una buena parte de las energías del político se destina a conseguir subvenciones». Por el Fondo de Compensación Municipal, el Ajuntament percibirá 53.000 euros, una partida que tampoco resulta elevada para el alcalde de Puigpunyent. «No tenemos ninguna autonomía. Siempre dependemos de limosnas», concluye.

El alcalde pidió a la Conselleria d'Educació i Cultura el inicio de la construcción de la escuela municipal. Hace tiempo, según indicó, el Ajuntament cedió el solar junto al polideportivo para construir el nuevo centro escolar. «El emplazamiento es de lo mejor», aseguró Ferrà, quién destacó que en la actualidad hay entre 80 y 90 alumnos en la escuela y se prevé que este número aumente. De hecho, la pasada legislatura se creó una «escoleta municipal» y, este año, hay matriculados 34 alumnos. Una vez desafectada la escuela, se resolverá el grave problema de falta de locales públicos del Ajuntament. El centro, aseguró Joan Ferrà, albergará aulas para los jóvenes, personas mayores y para el «grup d'esplai».