El Consell inspeccionará, entre otras cosas, la distribución de espacios de la casa.

TW
0

Los técnicos del Consell de Mallorca que acudieron anteayer a inspeccionar la casa y las cuadras del alcalde de ses Salines, Sebastià Vidal (PP), no pudieron acceder a la finca y fueron «invitados» a marcharse por parte de un grupo de personas, según narraron fuentes de toda solvencia. El objetivo de la inspección era determinar si la casa es utilizada por el primer edil como vivienda a raíz del recurso de alzada presentado por PSM, PSOE y EU-EV al interés general que legaliza las cuadras y la casa concedido por el Consell de Mallorca. La institución insular había mantenido hasta ahora que el interés general que legaliza las edificaciones como sede de la Agrupació de Cavallistes estaba dado correctamente en base a cuatro informes favorables de otras tantas consellerias del Govern balear. Según el interés general la construcción no puede ser utilizada como vivienda y en ella sólo puede haber una garita para un guarda. Sin embargo, «tenemos que comprobar las informaciones que han aparecido sobre el hecho de que la casa es utilizada como vivienda» por el alcalde de ses Salines, declaró ayer el conseller insular d'Urbanisme, Bartomeu Vicens.

Vicens explicó que los técnicos no pudieron acceder a la finca cuando acudieron a hacer la inspección pero que en cualquier caso ya sacaron fotografías con detalles de las edificaciones. A pesar de este impedimento, «solicitaremos expresamente que nos faciliten el acceso» para llevar a cabo la inspección que determinará, entre otras cosas, la distribución de los espacios, las instalaciones existentes (aires acondicionados, electricidad, electrodomésticos, etc) y el volumen de las construcciones. «Recopilaremos cualquier dato objetivo para llegar al fondo de este expediente y que se tendrá en cuenta», apuntó Vicens.

En el caso de que la inspección revele alguna irregularidad como que el alcalde reside o ha residido recientemente en la vivienda, el Consell podría concluir que el interés general se retire. En este caso, el procedimiento habitual sería abrir un expediente de infracción urbanística. Hay que recordar que las cuadras y la vivienda son ilegales porque la parcela 21 del polígono 9 donde están construidas sólo cuentan con 8.500 metros cuadrados cuando la normativa urbanística estipula que debería contar con un mínimo de 14.000. Vidal intentó adquirir los metros cuadrados necesarios a algún solar vecino para legalizar las edificaciones pero no fue posible. Ante esta situación la vía final fue conseguir la legalización mediante un interés general como sede de la Agrupació Cavallista. Desde que la legalización vía interés general de las cuadras y la casa salió a la luz, el municipio es un hervidero de comentarios sobre este tema. El hecho de que el alcalde haya mantenido desde el primer momento que no utiliza la casa como vivienda ha dado aún más que hablar puesto que el uso de «residencia privada» por parte del primer edil es más que conocido por lo vecinos. Sin embargo, fuentes solventes han comentado que desde que surgió la polémica el alcalde realizó una «mudanza» de urgencia para evitar que una inspección le retirara el interés general.