El ambiente estaba caldeado. Los peñistas pusieron color a Felanitx.

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G.V/J.S/A.B
La resurrección de la Kika, la bendición papal felanitxera de un caricaturesco Benedicto XVI desde el balcón de la casa de can Picó en la plaza de S'Arraval, daba la bienvenida a una jornada festiva menos reivindicativa que en años anteriores y donde estelades, senyeres y las ikurriñas volvieron a tener su protagonismo. Era a primera hora de la mañana. El municipio de Felanitx salía a la calle a festejar Sant Agustí coincidiendo este año con el mercado de la localidad y ante la estupefacción de muchos turistas.

A las 10,30 horas las autoridades se concentraron ante el Ajuntament de Felanitx. La alcaldesa Catalina Soler y su corporación estuvieron acompañados en esta ocasión por el conseller d'Interior del Govern Balear, José María Rodríguez, en representación del Consell, Francesc Buils i el president de s'Institut, Antoni Serra. El tradicional baile de los cavallets dio el inicio a la procesión hacia el Convent de Sant Agustí donde se celebró la misa solemne.

Entre tanto, en las inmediaciones de Can Moix las diferentes peñas se iban congregando. Miles de peñistas ponían la nota de color y el ambiente en el día del patrón.

La peña más antigua, la de El Coso, es la que tradicionalmente lleva la Kika disecada y a modo de estandarte, junto con el palio. Es cuando termina la misa cuando se reta a pasar a las autoridades bajo el palio que este año lucía en todo su esplendor pues la tela de domàs se ha renovado. No hubo incidentes y los asistentes cumplieron fielmente con la tradición de pasar bajo el palio aclamados por un numeroso público reunido ante Es Convent. Rodríguez recibió algunas pitadas e insultos, la alcaldesa tuvo que capear las esteladas que rondaban sobre su cabeza y a hombros salió el rector, Llorenç Lladó, uno de los más vitoreados y aclamados.

Fue un Sant Agustí menos reivindicativo que en años anteriores incluso la alcaldesa se salvó de ser aupada por los miembros de las peñas.

La fiesta continuó pasadas las 13 horas ante el Ajuntament donde los cavallets ofrecieron sus danzas. Las peñas acompañadas de los xeremiers seguían animando y caldeando el ambiente. Sonó «el jaleo», «No em volem cap» y el himno republicano de Riego. El Ajuntament ofreció un refrigerio a los asistentes y actuaciones musicales. Luego hubo la fiesta de la espuma. Posteriormente a las 18 horas la cita de los vecinos de Felanitx era en la plaza de toros de la Macarena.