Los servicios de rescate y emergencia de Pollença funcionan a la perfección. Así lo demostraron durante un simulacro de rescate en la Cala Sant Vicenç, concretamente en la playa de Cala Molins.
El equipo de la Cruz Roja que se encarga del socorrismo de las playas del municipio de Pollença consiguió rescatar a un joven con una pierna rota y contusiones leves y a una joven con parada cardio respiratorio en tan solo unos 15 minutos.
El traslado del herido con traumatismos leves hasta la playa de Cala Molins se realizó con una moto acuática, después que los socorristas fueran avisados por el centro de emergencias y procedieran a la evacuación del herido que fue trasladado hasta la playa donde se le practicaron los primeros auxilios. Justo después, los socorristas recibieron otra emergencia de una joven con parada cardio respiratoria que también trasladaron hasta la playa donde la reanimaron con la respiración boca a boca, hasta la supuesta llegada de una ambulancia.
El regidor de Medio Ambiente del Ajuntament, Jaume Plomer, manifestó ayer que «desde el Ajuntament se trabaja para tener un gran nivel de seguridad en todas las playas del municipio y por ello se llevan a cabo todos los esfuerzos necesarios».
De esta manera, Plomer aprovechó para recordar el buen trabajo de los miembros de la Cruz Roja. «Antes de implantar el sistema de la Cruz Roja en el salvamento de las playas, cada año teníamos una defunción, pero desde hace tres temporadas que no hemos tenido que lamentar ningún fallecido en las playas de Pollença».
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