La lluvia dio una tregua ayer por la mañana y permitió que se celebrara el tradicional homenaje a la tercera edad de Bunyola, uno de los actos centrales que pone fin a las fiestas de Sant Mateu.
El homenaje contó este año con la visita del president del Govern, Francesc Antich, que compartió con los mayores de la localidad el homenaje que les rinde el Ajuntament. No faltaron los coches de época que trasladaron a los más mayores cómodamente hasta la iglesia, donde se celebró una misa. Los lujosos coches acogieron al Padrí Major Gori Estarellas; la Padrina Major Maria Quetglas y el matrimonio del municipio más mayor formado por Joan Bujosa y Antonia Estarellas. Maria Quetglas, de 99 años, sustituyó a Margalida Riera, que en noviembre cumple 100 años, porque una caída le impidió asistir al acto.
Tras la misa, los 192 mayores del municipios se trasladaron a la Posada de Son Garcias para tomar un refresco. El Ajuntament dio a todos los mayores un obsequio.
Los actos festivos de la tarde dirigidos especialmente a los más pequeños sí que se debieron de suspender debido a las lluvias caídas.
Ayer se puso punto y final a las fiesta del patrón Sant Mateu que se han celebrado intensamente la pasada semana, sobre todo el fin de semana.
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