Ruberts no tendrá más adosados tras un preacuerdo entre Ajuntament, vecinos y promotora

Los vecinos de Ruberts, la empresa promotora que comenzó a construir los cuatro polémicos adosados y el Ajuntament de Sencelles están a punto de cerrar un acuerdo que «restablecerá la legalidad urbanística» en la aldea, tal y como ordenó el juez hace casi dos años.
El principio de acuerdo prevé que los tres adosados construidos y habitados se mantengan y se legalice su situación. Los cuatro adosados restantes, cuyas obras se suspendieron en 2006, ya no se acabarán. El alcalde de Sencelles, Joan Carles Verd, explicó que el solar donde ahora se levantan los cimientos de las viviendas pasará a ser de propiedad municipal y que se compensará a la promotora trasladando la edificabilidad adquirida al casco urbano de Sencelles. Asimismo, todo el crecimiento urbanístico que preveían las Normas Subsidiarias de 1995 se anulará definitivamente. En este sentido, cabe recordar que los tribunales ya invalidaron el ordenamiento de Ruberts, pero el Consistorio nunca llegó a planificar una nueva normativa.
Contenciosos
La polémica urbanística de Ruberts arrancó en 2001, cuando el Ajuntament de Sencelles, entonces gobernado por el PP, concedió una licencia que autorizaba la construcción de tres adosados en la entrada de la aldea. El GOB y los vecinos se opusieron enseguida e impugnaran la decisión, pero cuando los tribunales, cinco años después, les dieron la razón, los adosados ya estaban levantados y habitados. Estas tres viviendas se mantendrán. El segundo contencioso urbanístico, todavía pendiente de resolver, también lo pusieron los vecinos y el GOB por una licencia que permitía construir cuatro nuevos adosados.
Las viviendas se empezaron a levantar pero Joan Cerdà, quien entonces ostentaba el cargo de conseller insular de Patrimoni, ordenó la paralización de las obras por miedo a que no echaran a perder un yacimiento arqueológico próximo. Estos son los cuatro adosados cuyas obras que ya no se acabarán.
Con el fin de evitar indemnizaciones que podrían resultar millonarias, Joan Carles Verd detalló que la promotora pretende aceptar una propuesta del Consistorio para trasladar la edificabilidad -el aprovechamiento urbanístico adquirido- a un solar de titularidad municipal del núcleo de Sencelles.
Zona verde
Por contra, el solar de Ruberts pasará a ser una zona verde y de equipamientos de propiedad del Ajuntament donde se podría construir un aparcamiento.
El resto de viviendas que preveían las Normas de 1995 (exceptuando las del interior del casco urbano) tampoco se podrán construir.