Esperada ‘processoneta' de la Beata

Tras dos años de parón obligado debido a la pandemia, había muchas ganas de celebrar este desfile que recrea la esencia de lo que se vivirá el próximo domingo con la Beata y que este año contó además con la participación de los gegants y los xeremiers que animaron el recorrido.

Las previsiones de tormenta no desanimaron a los participantes y la processoneta pudo celebrarse sin problema, aunque al mediodía sí que cayó un buen aguacero. El itinerario arrancó en la calle Constitució y contó con cinco carrozas (Segadors; Cuina de Son Gallard; Es Pou; Flor de ametller y Glorificació) según las edades de los participantes. La Beata este año fue encarnada por la pequeña Naiara Cladera, acompañada por Abril Mir y Bàrbara Pastor.

Por su parte, Maria Magdalena Ribot, máxima responsable de la processoneta, agradeció la implicación de los padres y madres de la Escoleta 0-3 que se han volcado en su organización. «El viernes por la tarde nos reunimos para confeccionar las carrozas y contamos con muy buena respuesta», explicó Ribot que también quiso agradecer el trabajo de las maestras en este sentido. Este año, además, la processoneta tuvo un recuerdo especial para la tía de Naiara Cladera fallecida recientemente, según quiso destacar Ribot. Esta también recordó que como novedad el pequeño desfile también se ha abierto para que todos los niños y niñas del pueblo puedan participar, eso sí, vestidos de manera tradicional.

Fue en el año 2015 cuando la Escoleta 0-3 organizó por primera vez processoneta de la Beata, que ha ido cogiendo fuerza y protagonismo en el programa de actos. «Es una manera de que los niños pierdan el miedo a los dimonis y se preparen para la Processo de la semana que viene», destaca Ribot. El desfile de este sábado por la mañana terminó en la plaza de la Església con la trencadissa de gerres por parte de los pequeños dimonions.