Iris Bugué y María Elena Viruez, de Bunyols Boníssims. | Pere Bota

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Que a nadie le amarga un dulce, es un dicho popular que conecta de forma directa con los ricos buñuelos que aquí, en Mallorca, se degustan con motivo de la fiesta de Les Verges, que se celebra el domingo día 20 y el lunes 21, festividad de Santa Úrsula. Según cuenta la tradición, esta santa fue inmolada juntamente con las denominadas Once mil Vírgenes. Por otra parte, las veteranas gentes del mar tienen por ventoso este día y por eso dicen que «Hoy es Santa Úrsula, la ventosa».
Dos son las especialidades de buñuelos que se consumen, los fritos amb forat, y los rellenos, elaborados a partir de pasta choux.

Desde hace unos años, los buñuelos fritos los tenemos todos al alcance de la mano, ya que la empresa Bunyols Boníssims los elabora en directo en tres puntos de la ciudad: El Corte Inglés de Avenidas, en Carrefour de General Riera y Fan del Coll d’en Rabassa.

La buñolera, María Elena Viruez (centro Carrefour), que lleva once años elaborándolos explicó que «nosotros los elaboramos a partir de harina de fuerza, puré de patata, azúcar, sal y levadura de panadería. A partir de las 9.00h estamos en el puesto y tienen mucha demanda por el público, ya que después del verano apetece degustar tradición. El puesto está abierto hasta las 21.00h, horario que se mantendrá durante la fiesta. El precio por kilo es de 20 euros».

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En el Forn i Pastissería Trias, del Secar de la Real el pastelero Pep Trias mantiene por esta fiesta la tradición de elaborar los buñuelos, en las variedades, fritos y rellenos. «Los buñuelos son especialidades demandadas en estas fechas, aunque nosotros empezamos por Sant Miquel a elaborar los que van rellenos y los mantenemos a la venta hasta la primera quincena de noviembre. De esta especialidad hacemos los más clásicos: de nata, trufa y crema, cuya demanda va a la par. Al comprarlos los piden de las tres clases».

Margalida Serra, del horno Reina María Cristina señaló que en «en el horno los elaboramos de las variedades rellenas de nata, trufa y crema. Entre los más demandados están los de crema, aunque son muchas las personas que piden una bandeja de buñuelos variados. Es muy importante en su elaboración, que tanto la crema como la nata sean muy frescos y la pasta con una textura fina».

Desde hace tres años el pastelero Ángel Cortés, de la pastelería Ángel de Palma, logró una de las especialidades más sugestivas en cuanto a buñuelos rellenos. Creó la especialidad de crema de naranja, que ha tenido mucho éxito. «Junto al pastelero Francisco Estrella, los dos en el obrador, conjugamos texturas con el zumo de naranja de Sóller y devino una delicia. El año pasado, incorporamos los rellenos de crema de boniato, que se mantienen, junto a los clásicos de nata, trufa y crema».

El escritor Miquel Ferrà i Martorell explicó que «esta fiesta se celebra en Mallorca desde la Edad Media. En cuanto a los buñuelos, por sus ingredientes, pueden considerarse un postre mediterráneo. Los árabes elaboraban el denominado ‘makrout’ una especialidad a base de miel y almendras, mientras que en la cocina sefardita se encuentran recetas de lo que ellos denominaban bimuelos.