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1 Cuando perdí la relación política –que no personal– con Esquerra Unida de les Illes Balears, lo hice porque pensaba que la relación con Podemos empezaba a ser excesiva y no traería nada bueno. El tiempo me ha dado la razón. Desde mi nueva posición, pude ser más libre, decir lo que quería sobre Podemos y, todo ello, sin la necesidad de cuestionar contra Izquierda Unida. El principio de lealtad es importante y aunque siempre caben las discrepancias, hay que saber estar con los que han sido compañeros de batalla durante tanto tiempo y ser respetuoso con las siglas de tu partido.

2. Si comento esto último es en relación a las distintas declaraciones que, en estos últimos días, Felipe González y Alfonso Guerra han expresado contra una posible amnistía. Naturalmente, González y Guerra están en todo su derecho de dar su opinión, pero masacrar al secretario general actual o, en el caso de Alfonso Guerra, insultar a Yolanda Díaz con el desafortunado comentario sobre la peluquería es del todo impresentable a estas alturas.

3. Además, respecto a la polémica amnistía que se plantea, la mayoría de la gente que está en contra lo está porque interpreta que es una concesión para el independentismo en general y para Carles Puigdemont en particular. Pero en mi opinión, lo importante es saber que esta amnistía es la mejor herramienta de la que disponemos actualmente para acabar con el conflicto en Cataluña.