La noticia del disparo mortal en el taller de la calle Cecilio
Metelo corrió ayer como la pólvora entre los vecinos de Pollença, y
muchos de ellos se congregaron frente al negocio para interesarse
por lo ocurrido.
Los residentes, que destacaron de forma unánime que «Joan es muy
buena persona», refiriéndose al detenido, explicaron que habían
escuchado «gritos de pelea», aunque sólo unos pocos apreciaron a
continuación una detonación: «Yo estaba en mi casa y de repente
escuché como una explosión; no sabía qué había pasado y cuando bajé
a la calle ya me encontré a Joan con más gente en el taller,
destrozado y muy abatido», contó uno de los testigos. Algunos
residentes aguantaron el sol de justicia de ayer y se pasaron tres
horas frente al taller.
El mecánico parece ser que fue atendido en un centro médico
antes de quedar recluido en los calabozos y los vecinos que
acudieron al local al poco tiempo de producirse el disparo mortal
manifestaron que durante la pelea también se había esgrimido una
barra de hierro. El taller «Auto-Xapa» es muy popular en Pollença y
su propietario es ampliamente conocido entre los residentes, que
explicaron que llegó a Mallorca «hace muchos años» y luego montó el
negocio, que antes estaba ubicado en la misma calle pero a otra
altura.
El fallecido también tenía muchos conocidos en Pollença y las
personas consultadas por este periódico señalaron que «siempre lo
veíamos en un coche distintos, y muchas veces eran deportivos», y
recordaron que era un alemán «de tamaño considerable, con el pelo
rubio y muy largo, que a veces llevaba coleta». El único detenido
tiene un plazo de tres días para ser puesto a disposición judicial,
en Inca, y los investigadores tienen previsto apurar las 72 horas,
por lo que es muy probable que declare ante la jueza el lunes a
primera hora de la mañana.
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