Los vecinos y comerciantes perjudicados pudieron terminar de
limpiar sus viviendas y establecimientos y empezaron a reparar los
desperfectos. La lluvia hizo acto de presencia con mayor intensidad
en Lluc, Capdepera y Pollença, aunque fueron chubascos
intermitentes. Las estaciones del Centro Meteorológico de Baleares
recogieron apenas 6 litros por metro cuadrado en Lluc y 2,4 en
Pollença.
En Palma, una excavadora y operarios de EMAYA retiraban ayer por
la mañana la arena y el agua que el viento dejó en la primera línea
de es Molinar y es Portixol. En Can Pere Antoni, la basura
arrastrada por el temporal inundó la playa. Algunos surfistas
aprovecharon las olas y se adentraron en el agua al igual que
sucedió en Illetes. La playa de Camp de Mar, en Andratx, volvió a
quedar partida en dos por la gran cantidad de agua que llevaba el
torrente, al que fueron a parar las pasarelas de madera instaladas
en la arena. El temporal destruyó también el pequeño embarcadero
del restaurante de la isleta que hay frente a la playa. También en
Andratx, los vecinos de Sant Elm se quejaron de que la playa de
esta zona volvía a estar sin arena.
En Eivissa, empeoró el estado de salud de una mujer alemana de
59 años, vecina de sa Cala, que resultó herida grave al sufrir una
caída. La mujer estaba subida a una escalera el viernes reparando
un toldo dañado por el temporal y se golpeó la cabeza al caer.
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