La violencia doméstica que sufren las mujeres se ha convertido en
estos momentos en uno de los principales problemas, ya que el
número de casos se ha disparado, de tal forma que incluso una mujer
ya ha muerto en Mallorca asesinada por su ex compañero sentimental.
Casi a diario los jueces de Palma han de tomar alguna decisión
sobre algún caso de violencia doméstica y muchas mujeres se sienten
indefensas ante la violencia que demuestra el hombre con el que
están conviviendo.
Una de estas personas es Mercedes, que el pasado martes fue
agredida por su ex compañero sentimental, un marroquí de 32 años de
edad, que ayer fue presentado ante el juez y fue condenado por una
falta de malos tratos. El hombre aceptó la acusación y el juez le
impuso una multa, debido a que las lesiones que sufrió la víctima,
pese a que a primera vista parecen espectaculares porque tiene
ambos ojos morados, son leves y al agresor no se le puede acusar de
un delito. El juez, además de la pena, sólo puede dictar una orden
de alejamiento para evitar que el agresor se acerce a su ex
pareja.
Mercedes concedió ayer una entrevista a Ultima Hora y explicó
que tiene los ojos amoratados tras recibir una patada en la cara
que le propinó su ex pareja por recriminarle que le robara dinero
de su cartera. La mujer se planteó una pregunta: «¿Hasta cuándo las
mujeres vamos a sufrir malos tratos?» Sin duda ella no encontraba
ayer una respuesta a esta cuestión, porque no entendía que la
persona que le causó estas lesiones (que le obligan a llevar gafas
de sol porque le da vergüenza enseñar los ojos morados) pueda ser
sancionado «sólo a una pena de multa».
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