Javier Jiménez05/10/05 0:00
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La Comandancia de la Guardia Civil de Palma sería el último lugar al que la mayoría de delincuentes iría a refugiarse, por motivos obvios. José G.A., de 33 años, no debía pensar lo mismo o quizás estaba tan desesperado que prefirió entrar en aquellas dependencias a enfrentarse a un grupo de jóvenes que lo estaba persiguiendo por un 'tirón' cometido minutos antes en el polígono de Levante. El desenlace fue el esperado: el hombre acabó en los calabozos.

La víctima caminaba por la calle California, una travesía de la calle Manacor, a las 23,50 horas del pasado día 30 de septiembre. De repente, cuando se encontraba junto al parque inaugurado el año pasado, un desconocido se le acercó por la espalda y le agarró con violencia el bolso. La mujer, en un acto reflejo, se aferró al bolso, y fue zarandeada con violencia por el asaltante, que consiguió sustraérselo. La víctima, lejos de achantarse, comenzó a proferir gritos y pidió ayuda: «¡Policía, policía!».

Según explicó ayer el portavoz de la Jefatura de Policía, un grupo de jóvenes se encontraba en las inmediaciones y acudió en auxilio de la señora en apuros. Rápidamente salieron en persecución del delincuente, que enfiló la calle Manuel Alcántara, donde se ubica la Comandancia de la Guardia Civil. Antes de llegar, sin embargo, fue 'cazado'. Los muchachos lo retuvieron el tiempo suficiente para recuperar el bolso, pero José G. emprendió de nuevo la huida en dirección al cuartel. Posiblemente temía que lo lincharan y entró precipitadamente por el acceso principal, gritando «me quieren agredir».

En la puerta hay siempre un retén de guardia, compuesto por varios guardias civiles, que se interesaron por el estado de gran agitación de José G. De forma paralela, en la calle los acontecimientos siguieron su curso. La mujer recuperó el bolso y una patrulla del Módulo General Operativo del CNP se hizo cargo de la investigación. Los testigos explicaron que el presunto 'tironero' se había refugiado en la Comandancia y la resolución del caso fue cuestión de minutos. Demasiado fácil.