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JAVIER JIMÉNEZ La Policía Judicial de la Guardia Civil de Pollença ha detenido a un individuo de 38 años que supuestamente roció con un líquido inflamable a su ex mujer y la intentó quemar viva.

Los hechos ocurrieron el jueves a las siete y media de la mañana, en un segundo piso de la calle Virgen del Carmen, en el Port de Pollença. La moradora de la vivienda, una mujer de mediana edad, escuchó unos ruidos sospechosos y de repente reparó en que alguien se había colado en su vivienda por la ventana. El individuo era su ex marido, que iba armado con un cuchillo. Antes de que ella pudiera reaccionar roció sus ropas con un líquido inflamable, hasta dejarlas empapadas. Luego sacó un mechero y empezó a jugar sádicamente con ella. Una chispa cerca habría sido suficiente para que la mujer se hubiera convertido en una tea.

En un momento de descuido de J.D.D.F. la mujer consiguió llamar por teléfono a la familia de él, que a su vez se puso en contacto con la Guardia Civil para alertar de lo que estaba pasando.

Cuando los agentes llegaron a esa casa la mujer estaba terriblemente afectada y el sospechoso había escapado. Todas las patrullas disponibles se pusieron en marcha para localizarlo, pero en las primeras horas consiguió burlar el dispositivo.

A las seis de la tarde de ese mismo día, finalmente, el fugitivo fue descubierto en el Hostal Vista Alegre, de Alcúdia, donde fue arrestado. Está acusado de los delitos de intento de homicidio, coacciones y allanamiento de morada.

El hombre, que cuenta con antecedentes en la Guardia Civil y la Policía por robos y otros delitos, negó las acusaciones de su ex mujer, pero parece ser que un testigo lo vio saliendo de la casa esa mañana, lo que confirmaría la versión de la víctima. Los investigadores están analizando el líquido combustible con el que roció a la mujer, que estaba en un bote de un litro de capacidad.