Ilona Novackova, Iris Isabella Fuerer, Helena Szaboova y Àngels Mercer disfrutando del brindis más Navideño. | Jaime Verd

TW
0

Es de las personas que más pueden ayudarles si sufren de algún problema de salud, sea físico o mental. Ponerse en sus manos es atravesar una barrera de tabúes que desde la dulzura de nuestra protagonista se convierten en banalidades pues su sabiduría y el trato tan especial que da a cada uno de sus pacientes es maravilloso.

Sus masajes de reiki, todo el poder que emana de ella se ve también en su preciosa casa de Andratx, donde cada rincón es armónico, y más en estas fechas donde la decoración navideña coloniza a lo grande cada uno de los espacios, y lo hace con exuberancia centroeuropea, mucha creatividad y mucha elegancia. Cómo no podía faltar, pues es ya tradición que nos reciba, hubo brindis navideño con espíritu amistoso de nuestra querida Iris Isabella, que abrió las puertas de su especial oasis Espai de Salut Iris para celebrar un encuentro entre amigos en su preciosa casa transformada en un cuento de Navidad muy cálido.

El amor que pone en todo lo que hace da como resultado una magia incomparable, además de su gran estilo y gusto por la decoración hizo de cada rincón único, como si la Navidad estuviera sumergida en su precioso paraíso, con un jardín decorando con cientos de luces y guirnaldas entre las originales velas y flores de Navidad.

En ese espacio ideal también nos brindó el tradicional vino caliente Glüwhein, de lo más casero, hecho por su pareja Oliver, quien se encargó de que la noche estuviera aclimatada alimentado la hoguera que nos calentó durante la velada en el encantado porche donde nos sirvieron un exquisito aperitivo a base de distintos quesos y uvas junto con un original arbolito de navidad creado a base de deliciosas brochetas de queso y frutas. Ideal.