Con los primeros vapores veraniegos los efímeros hits del verano toman las pistas de baile. | ARCHIVO UH
Desde la década de los sesenta la canción del verano constituye un género en sí mismo, todo un fenómeno de masas sostenido en las ondas radiofónicas, y favorecido por el desembarco global de nuevas tecnologías como Internet. Con los primeros vapores veraniegos estas efímeras píldoras musicales son consumidas frenéticamente para, unos meses más tarde, caer en el olvido y pasar a engordar algún casposo recopilatorio. Sin embargo, algunas de ellas han logrado perdurar en el tiempo, y es que su escucha no deja de ser una cautivadora visita al pasado. Diferentes géneros musicales han visto coronados con el sello de ‘canción del verano’ a muchas de sus producciones. Así, desde el spanish ye-yé sesentero, abanderado por Los Brincos o Fórmula V, hasta los ritmos disloca caderas de Georgie Dann o David Civera han dejado su impronta en los meses en los que el mercurio se dispara.