Hoteleros de toda la vida, muchos de ellos pioneros, se están viendo en la necesidad de poner a la venta establecimientos que ellos crearon en los años 60 y 70 a causa de la crisis económica y porque el relevo generacional no se produce como ellos esperaban, de ahí que desde hace año y medio se están llevando a cabo operaciones de compraventa de hoteles de tres estrellas en las principales zonas turísticas, pero muy en concreto en la Platja de Palma.
Las últimas operaciones se han culminado en los meses de septiembre y octubre, en el que la cadena HM Hotels, que preside Antoni Horrach, se ha convertido en auténtica protagonista, al comprar a la familia Canals los hoteles San Diego y Solimar, así como el complejo Tenis Arenal.
Esta cadena adquirió el pasado año el hotel Balmes, en Can Pastilla, y ha sumado recientemente el hotel Ambos Mundos, ubicado en la Platja de Palma. Con estas operaciones, HM suma en su cartera unas 800 camas más en una zona en la que quiere incrementar su presencia por cuestiones estratégicas.
El presidente de la Asociación Hotelera de la Platja de Palma, Francisco Marín, señala que con estas operaciones, que continuarán en próximos meses con la venta de más hoteles, «se reactiva el mercado de venta de hoteles por parte de pequeñas y medianas cadenas hoteleras, lo cual es más que positivo porque ello supondrá procesos de renovación, incremento de categoría y mejora de la oferta de alojamiento».
8 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Vos mereixeu lo millor, família Canals-Salvà, per treballadors i bones persones. Ja toca descansar una miqueta després de tants d'anys, que vos ho mereixeu!
Pues menos mal que lo ha comprado una cadena mallorquina que tiene sus hoteles impecables, por otro lado. Y que invierte en la Playa de Palma, no en el Caribe.
El producto MALLORCA se vende muy barato, demasiado barato, por la calidad que tiene la isla en general. Me pregunto ¿porqué será? Tal vez porque son ya demasiado los hoteles,pensiones, etc, que en ella existen. ¿No sería más conveniente regularizar paulatinamente esta situación? A la postre si no lo hacemos nosotros lo hará el mercado, con la diferencia económica que conlleva y la pérdida elevada de control.
La saga de los Canals en s'Arenal de Llucmajor nace el 1º de mayo de 1946, cuando los padres de Pere Canals Morro (Santa María 28-8-1942), Andreu y Magdalena, se hacen cargo en calidad de arrendatarios del café y fonda Ca na Grina, con habitaciones, restaurante y bar.Andreu Canals, exciclista muy popular, a base de trabajo y sacrificio, invirtió 15000 duros de la época para pagar el traspaso del negocio,teniendo que renunciar al resto de su herencia familiar a favor de sus hermanos.Ya en el año 1956, 12 de junio, inaugura la familia Canals el hotel-apartamentos Solimar y en 1958 adquieren el futuro y emblemático Hotel San Diego, que en 1960 ya contaba con 66 camas.Pere Canals, que fuera concejal y alcalde pedáneo o delegado personal del popular alcalde Gabriel Ramón Juliá del Ayuntamiento de Llucmajor, consiguió el título de director de hotel el 4 de junio de 1969, otorgado por el Ministerio de Información y Turismo.Pere Canals, tras una entrevista que le hice publicada en Baleares, fue nombrado presidente de Agama o similar, ya que era también ganadero.Fue fundador de Aquacity y propietario del Club Tenis Arenal, además de copropietario del Hotel Ayron Park.Fue secretario durante 12 años de la Asociación de Hoteleros de la Playa de Palma, topónimo popularizado por GAFIM, desde las páginas del antiguo Baleares.(Un saludo para Pere Canals y para su amigo y biógrafo Tomeu Sbert.Suyos son sus apuntes utilizados en este comentario).
Hoteleros de toda la vida ...!!!Pero llegó el Tour Operador ( ó Tour Horterator )y se lo cargó todo ,Mallorca incluida .
Dios le da dientes a quien no puede comer....
Animo Pedro y familia. Como bien dice, Hoteleros de toda la vida, pero de los buenos, de los que tratan directamente con los clientes como si fueran parte de su familia, hoy en día se está perdiendo esta dedicación tan personalizada. Lamento que no haya traspaso generacional.