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El alcalde de Palma, Jaime Martínez, ha apostado por una ciudad «más abierta al turismo y orientada a favorecer la calidad de vida de los vecinos» con una defensa del pequeño comercio y una mención especial al negocio de la restauración. Martínez ha pronunciado su primer discurso en la plaza de Cort con motivo de la Festa de l'Estendard Martínez ha reclamado una ciudad «sostenible» desde una óptica medioambiental, con una Palma con más áreas verdes y con más espacios naturales, pero también sostenible desde un punto fe visto social, económico y cultural. «Palma tiene que recuperar su condición de municipio pensado para las personas», ha dicho Martínez.

« Queremos que Palma sea la mejor ciudad del mundo para vivir, y si lo conseguimos también será la mejor ciudad del mundo para visitar», ha añadido. El alcalde ha apostado por una ciudad «acogedora, amable y sostenible» y ha apelado a recuperar la imagen de Palma como destino turístico de referencia al entorno mediterráneo y en el conjunto de Europa. Ha asegurado que el turismo es la actividad económica que «en mayor medida» confluye en la creación de oportunidades laborales y empresariales, «pero el éxito de esta fórmula depende, fundamentalmente, de la capacidad de Palma para mejorar la seguridad y la limpieza, como decía antes, y también su oferta de servicios, entre los cuales la cultura y el deporte ocupan un lugar preponderante» El alcalde ha hecho una mención a los grupos municipales ya que ha añadido que, para conseguir este objetivo, se necesita «la implicación y el compromiso» de todos los regidores elegido para defender los intereses de los ciudadanos de Palma.

«Gobierno y oposición tenemos que cooperar, haciendo cada uno su papel, como es consustancial en una democracia, pero partiendo del criterio que antes mencionaba, que es el de considerar este Ajuntament y esta ciudad como una tarea que nos une a todos», ha enfatizado. El alcalde ha señalado que la ciudad ha experimentado un espectacular crecimiento demográfico en estos 20 años y, fruto de este escenario poblacional, el Ajuntament se ve obligado a encarar «manifiestas urgencias» en campos tan cruciales como la vivienda, la convivencia, la movilidad, la diversificación económica, «a trabajar en favor de la igualdad y teniendo en cuenta a todas las personas que llegadas desde diferentes partes del mundo han elegido Palma para vivir».

«Se trata, en definitiva, de trabajar para garantizar el derecho de todos los vecinos a disponer de un marco de igualdad de oportunidades que satisfaga sus legítimas aspiraciones de prosperidad y bienestar», ha añadido. Ha señalado que, entre las primeras actuaciones de Cort se deben situar aspectos primordiales en el día a día de la ciudad, como la limpieza y el mantenimiento de calles y plazas, «campos de intervención en los que se han logrado ya mejoras más que destacadas», ha señalado. «Palma tiene que ser una ciudad limpia y muy cuidada las 24 horas del día y los 365 días del año, del mismo modo que tiene que ser también una ciudad segura, donde residentes y visitantes puedan pasear sin tener miedo a los efectos de la delincuencia y el incivismo», ha afirmado. Martínez ha defendido «el logro» de un nuevo modelo de Policía Local, más próximo a los vecinos y en los barrios.

También ha señalado que debe avanzarse en cuestiones como la movilidad, con una vigilancia más estricta del cumplimiento de las ordenanzas «y un transporte público que sea capaz de satisfacer las necesidades de desplazamientos de toda la población». Martínez también ha mencionado en su discurso a la tercera edad, a la que ha considera imprescindible que se le preste más atención, y también ha tenido palabras para el colectivo de personas vulnerables, que, según ha dicho, constituye una prioridad para la Corporación. Ha destacado que los presupuestos recién aprobado sitúan a estas personas en el centro.

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