Cada vez más, tanto los turistas extranjeros, los nacionales como los locales, no se conforman con tumbarse en las espectaculares playas que dibujan la Isla para broncearse, ahora también buscan actividades, nuevos escondites, cultura, gastronomía, todo en lo que Mallorca destaca y puede ofrecer con sobresaliente. Repasemos varias opciones a modo de ideas, planes o propuestas para conocer la otra cara de la Isla... igualmente apetecible.
ESPECTÁCULOS
Los espectáculos son otra forma de divertirse en la noche mallorquina, pese a que la gran oferta discotequera de que dispone tampoco le decepcionará. Shows dinámicos, llenos de fuerza y con un trabajo cuidado al detalle como Piratas (Pirates adventure, Pirates Reloaded y Pirates Mutiny) o los que ofrece el complejo Son Amar, son solo algunas de las propuestas fijas que no se puede perder este verano.
Por otro lado, los teatros también se esfuerzan por presentar una agenda veraniega interesante como la venidera revisión de Mellizos, con los inconfundibles artistas Bertín Osborne y Arévalo, será en el mes de julio en el Trui Teatre; este año se suma a la oferta cultural de nuestra isla el siempre sorprendente espectáculo de El Circo del Sol, previsto para el mes de agosto en Palma Arena. Así pues, déjese sorprender por la calidad artística que se desarrolla en la tierra.
NATURALEZA
Disfrutar de la belleza de la isla es algo que podemos hacer a lo largo y ancho de sus cuatro puntos cardinales. Y es que Mallorca presenta una interesante oferta natural de varias índoles, por ejemplo, para conocer las profundidades programe una visita para alguna de las profundas cuevas subterráneas; indague sobre especies autóctonas en parques como el Puig del Galatzó, lleno de naturaleza y con actividades aptas para toda la familia; el Parc Natural de s’Albufera, al norte de la isla es otra posibilidad; profundice en la flora del Jardín botánico de Sóller; dé un salto a la mágica isla de Cabrera con su mezcla de historia y naturaleza; o conozca y visualice las estrellas desde el Mallorca Planetarium de Costitx... Son solo algunas de las numerosas opciones al alcance de su mano.
CON NIÑOS
Los pequeños de la casa son muy activos y pese a que disfrutan jugando en la playa, lo cierto es que no siempre es suficiente, y su curiosidad les lleva a ser grandes protagonistas de la oferta mallorquina, por ejemplo, Marineland, es un interesante delfinario y zoo marino. Y si precisamente, son los animales lo que más les interesan, hagan una visita Natura Parc. Katmandú es un mágico mundo con casas al revés, atracciones y otras sorpresas.
Por su parte, La Granja de Esporles es otro de esos parajes de obligada visita en la que se aúnan el pasado mallorquín con una exquisita arquitectura y naturaleza; o Palma Aquarium, un parque marino con más de ocho mil animales de 700 especies diferentes...
Aunque no son las únicas posibilidades para los niños, las fiestas que se preceden día tras día, a lo largo del verano en los pueblos mallorquines, aglutinan siempre actividades y talleres para ellos. Los parques acuáticos también son sinónimo de diversión para ellos, Aqualand o Western Park son algunos de los que podemos escoger.
CULTURAL
Los museos en Mallorca y las visitas a edificios emblemáticos pueden dibujar un itinerario muy enriquecedor para el turista, ejemplos como el casco antiguo de Palma o el Museo de Es Baluard son algunos ejemplos. Asimismo, el cine es una propuesta a tener en cuenta ya sea en salas de cine o al aire libre, ésta última una acción que cada vez está más de moda en los veranos mallorquines de muchos municipios.
