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Una niña de tres años se clava una jeringuilla en un parque de Palma
Los vecinos de la barriada palmesana de Son Fuster están en pie de guerra. De un tiempo a esta parte critican la falta de seguridad en el parque público, que amanece repleto de jeringuillas y cristales junto a los columpios, pero ayer esas quejas se convirtieron en verdadera indignación después de conocerse que una niña de 3 años se clavó el jueves una jeringa. La madre de la menor, llamada Ana, contó ayer a este periódico que a las cinco de la tarde acudió al parque de Son Fuster con la pequeña y otra amiga y su hija.
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